El Centro Estratégico para el Crecimiento y el Desarrollo Argentino (CECREDA) publica el informe «Análisis de situación y propuestas socioeconómicas para el Impenetrable Chaqueño». En él se plasman -gracias a un recorrido teórico interdisciplinario- propuestas económicas que tienen como finalidad el autoabastecimiento de la localidad de El Espinillo y de su población Qom, junto con el posterior mejoramiento de la calidad de vida.
Así es como, haciendo especial hincapié en las características socio- culturales de los habitantes de la región, tomando en cuenta las particularidades físicas del territorio y evaluando las posibilidades energéticas, se proponen las siguientes actividades agroindustriales: producción y posterior exportación de miel, explotación de ganadería porcina, producción de forrajes para el ganado caprino a través de la técnica de hidroponia y el avance de los cultivos algodoneros en las tierras fértiles.
Entonces, la región del Impenetrable Chaqueño presenta la capacidad de desarrollo de actividades que cuentan con alto grado de integración económica, lo que implica un aumento en la producción de valor junto con la integración participativa de las diversas comunidades. Acciones como la producción hidropónica de forraje verde y la ganadería porcina y caprina, devendrían en la unificación de la cadena productiva, generando desde el principal insumo ganadero hasta la comercialización de los productos envasados al interior y exterior del país.
De esta forma, la prosperidad de la actividad económica llevaría a un fortalecimiento tanto institucional como de infraestructura, abogando por la mejora en las comunicaciones entre diferentes localidades, construcción de sistemas de acueductos, gasoductos y redes eléctricas y la localización de instituciones prestatarias de servicios (hospitales, bancos, escuelas, universidades). Es así como un importante impulso en la economía generaría desarrollo social, desarrollo que se refuerza a sí mismo.
A través de dicho informe, CECREDA vuelve a tomar férrea posición con respecto al crecimiento y desarrollo: no podrá haber distribución económica si no se le agrega valor a las materias prima a través de la industria. De esta forma, agro e industria deben trabajar en conjunto, obteniendo ambos beneficios más que positivos. Y, al mismo tiempo, no se deben olvidar las particularidades propias de cada una de las regiones; por lo que, desde CECREDA se propone continuar con la planificación de economías regionales y parques industriales, puentes que tenderán a la soberanía económica y a la inclusión social.