La Red de Argentinos Investigadores y Científicos en el Exterior, o Plan RAÍCES, tiene como objetivo la creación de las redes de conexión necesarias entre los científicos argentinos radicados en el exterior y la ciencia que se desarrolla en el país, incentivando así, la repatriación de los distintos profesionales involucrados en el programa.
El mismo, es llevado a cabo por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, bajo dependencia directa de la Dirección Nacional de Relaciones Internacionales. Es importante destacar que dicho Ministerio fue creado en diciembre del 2007 por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, convirtiéndose en el primero de toda Latinoamérica. El Plan tuvo sus inicios en el año 2003, durante la presidencia de Néstor Carlos Kirchner, y dado a su trascendencia y los resultados obtenidos en la repatriación de investigadores argentinos, el Programa Raíces fue sancionado como Política de Estado mediante la Ley 26.421 en noviembre de 2008.
Como se mencionó, el Programa busca fortalecer las capacidades científicas y tecnológicas de la Argentina mediante el desarrollo de políticas de vinculación en conjunto con los científicos argentinos que viven fuera del país. De esta forma, no sólo se promueve el retorno de aquellos profesionales interesados en desarrollar sus actividades en la Argentina pero que hoy en día residen en el exterior por distintos motivos, sino también que permite la creación de un marco profesional a lo largo del país en pos de incentivar la permanencia de los científicos que ya han decidido retornar al país.
RAÍCES pretende ser un espacio destinado a difundir las actividades científicas y tecnológicas del país en el exterior, a mejorar la calidad y disponibilidad de la información acerca de los investigadores y profesionales argentinos altamente capacitados que residen en el exterior. Es decir, genera un espacio abierto para las inquietudes e iniciativas de los científicos argentinos, ya sean residentes del país o no, provocando en ellos un sentimiento de retención, vinculación, y principalmente, de retorno. Asimismo, se busca integrar a investigadores argentinos residentes en el exterior a las actividades del Programa de Atención a Áreas de Vacancia (PAV) involucrando al sector productivo del país, Fundaciones y otras ONG´s en las acciones del programa.
Además, busca cautivar a los científicos por medio de un programa de ofertas que despierte el interés de los mismos en brindar su aporte, tales como una gran variedad de proyectos, ofertas laborales, subsidios, seminarios y demás en sus líneas de acción. Algunos de estos ejemplos son los Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica (PICT RAÍCES) con el objetivo de desarrollar distintos planes de acción en forma conjunta con una institución de Argentina, la realización de seminarios y encuentros orientados a promover la transferencia de conocimientos entre los argentinos residentes en el país y aquellos residentes en el exterior, subsidios como “RAÍCES Siembra” que tienen como objetivo financiar proyectos conjuntos de investigación que involucre centros de excelencia en término de ciencia, tecnología e innovación en áreas de vacancia del país y centros de investigación del exterior donde hayan científicos argentinos trabajando.
Tal como detalla el Dr. Adrián Turjanski, Repatriado N° 600 gracias al Programa RAÍCES, vemos cómo funciona el mismo: “El programa RAICES tiene un rol central en un modelo de país que necesita tener científicos investigando localmente, ya sea para resolver problemas de índole social local, realizar avances tecnológicos o ayudar a la comprensión de los grandes interrogantes de la humanidad.
En mi caso particular, el programa RAICES funcionó como un faro, una luz en el horizonte que me marcó un posible camino de regreso. Si bien estaba en mi vocación volver, el saber que hay una nación que te necesita y te ayuda a reincorporarte no es algo menor.
No se puede olvidar que el país, tanto en el último gobierno militar como en los gobiernos democráticos posteriores, dio un mensaje de expulsión y no de inclusión a los científicos. Al viajar al exterior yo me instalé con mi familia y hay un sistema que te incorpora y se abren un número de posibilidades laborales que se evalúan junto con la posibilidad de volver. Es en ese momento que pesaron en mí las condiciones que se estaban gestándose en Argentina: aumento de becas para obtener doctorados, mayor número de subsidios, planificación de un rol del científico en un modelo de país y el programa RAICES, clave en mi decisión de volver.”
En números concretos, el 7 octubre de 2013 se presentó oficialmente a la científica repatriada número 1.000, demostrando cómo en 10 años de funcionamiento, el Programa RAÍCES había podido revertir, en conjunto con otras medidas y programas, la tendencia que siempre hubo en el país de fuga de cerebros argentinos, profundizada en la última década del siglo XX.
Ezequiel Gonzalez Sutil
Analista Cecreda